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Con 38.000 m2, esta hermosa finca tradicional ibicenca es un refugio natural con espacios multifuncionales.
La Finca de 280 años de antigüedad es el edificio más conservado con 380m2 y ofrece 4 dormitorios con baños ensuite, una cocina totalmente equipada, un gran patio privado y una zona cubierta para comer.
Situada a 100 metros (2min andando) de la valla, con 150m2, una Casita de 3 dormitorios sirve de refugio sereno cerca del bosque, con su propio patio techado, chimenea y cocina americana.
El diseño interior de cada habitación se ha curado con piezas artesanales al tiempo que se hace honor a la sencillez rústica. Un gran viñedo, amplias zonas de césped, huertas en terrazas y senderos privados en los bosques son las zonas de recreo de esta granja.
Construida en 1773, la villa se encuentra perfectamente protegida en una colina cerca de Santa Gertrudis y es el lugar perfecto para cualquier producción que busque evadirse en un auténtico ambiente ibicenco.