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Ático de lujo con tres terrazas y una vista perfecta sobre Berlín. Desde el salón se ve la emblemática Torre de TV justo delante de la alta fachada de cristal.
En las calles que rodean la Linienstraße se hace evidente la esencia de lo que ha hecho mundialmente famoso a Berlín: el relajado estilo de vida de la capital. Materiales de alta calidad y una sutil fachada de piedra natural en el exterior se encuentran con el latón y el acero bruñido en el interior, que presenta puertas de suelo a techo y espacios diáfanos.
En este nuevo epicentro emerge una Gesamtkunstwerk finamente sintonizada, caracterizada por un lenguaje de diseño reducido, interiores sofisticados y un entorno dinámico, que tiende con gracia un puente entre la arquitectura de los años veinte y el Berlín contemporáneo.
Elementos con encanto como los esbeltos perfiles de acero hechos a medida de las puertas que van del suelo al techo y los suelos de roble teñidos a mano crean un aspecto distintivo: cálido y elegante, delicado pero con reminiscencias de estilos industriales. Una cuidada selección de materiales duraderos realza las características únicas de los espaciosos interiores.
El cielo sobre Berlín: El aireado balcón y la azotea casi circundante hacen del ático un lugar único que combina la urbanidad absoluta con la tranquilidad apartada.
