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Con vistas a la bahía de Nápoles, esta majestuosa propiedad se eleva por encima del mar sobre un acantilado. Con una de las mejores vistas del mundo y un esplendor pocas veces visto, tanto en el interior como en el exterior, Villa Astor ha sido calificada con razón de "Paraíso". Con una larga historia que se remonta al siglo I d.C., cuando Agrippa Postumus, nieto del emperador Augusto, la convirtió en su residencia, Villa Astor ha sido durante mucho tiempo el hogar y el destino de ricos y nobles.
Adquirida por uno de los hombres más ricos de la época, Lord William Waldorf Astor, en 1905, la Villa se convirtió en el proyecto de su pasión, ya que amplió el territorio y diseñó un espléndido jardín en la parte trasera de la casa, donde antaño había un monasterio dominico. Su última adición a la propiedad fue la villa "pompeyana", que decoró con columnas jónicas y frescos neoclásicos de un artista romano, Mario Spinetti. Tras su muerte, la Villa pasó por un periodo de oscuridad, aunque incluso durante este tiempo siguió atrayendo a personajes notables, como Benedetto Croce, el venerado filósofo y político italiano, que vivió allí durante la Segunda Guerra Mundial. En la década de 1970, Villa Astor fue adquirida por una acaudalada familia, Mariano Pane y su esposa, que acogieron a numerosos huéspedes ilustres, como la princesa Margarita, Rudolf Nuriev, Gregory Peck, Sofia Loren, Franco Zeffirelli y Gianni Agnelli. En la actualidad, Villa Astor es un referente del alojamiento de lujo en la costa de Amalfi y ha sido nombrada casa de vacaciones de ensueño por numerosas publicaciones sobre viajes y estilo de vida de lujo, como Town & Country, Quintessence, Forbes, Bloomberg y Telegraph.